Omar Álvarez conocido como El Guerrillero en el mundo del coleo siempre sobre los lomos de la yegua La Guerrillera del Gordo Egui Cruelmente asesinado hace muchos años llegando a su finca. Omar es mi amigo desde que soy un niño y me iniciaba en los toros coleados a los 12 años de edad. Fué siempre un coleador aguerrido y bueno coleando por Dtto Federal. Su hija es la Dra Anais Alvarez hoy médico Veterinario Practicante en Equinos y exigente jinete sobre un caballo bueno. Que alegría verlo de nuevo visitandome en mi lecho de enfermo cuando mi vida se me iba de las manos. Tengo una gran anécdota con el siendo comisario de la Disip y yo era candidato a la asamblea nacional constituyente 4 malandros de una banda que operaba en Sabana Grande me vieron salir del metro llegando de inscribir mi candidatura sin ayuda de ningún partido político. Los 4 tipos me quisieron maquinar para robarme Eran unos locos, lo que no tenían idea es que yo solo soy un manicomio lleno de gente. El cuento es muy angustiante pero salí ileso. Nunca se imaginaron quien y como era yo y mas vale que no, aun deben recordarme esas escorias de la sociedad si es que están vivos. Frente al banco de Venezuela fué la emboscada de las ratas. Al principio pensé eran unos amigos que me jodian pero de inmediato entendí que era para joderme y robarme un Rolex que aun conservo Eso fué desde el primer segundo patada y coñazo sin parar mientras yo gritaba como loco enajenado. Entre los 4 no pudieron conmigo. Al ver que yo era más loco que ellos 4 corrieron en direcciones diferentes. Al ver que no me quitaron nada no me quedé tranquilo y corrí tras una rata Llamado Adolfo Pacheco. En esa época tenía 27 años y era un Atleta en plenas facultades físicas y logré correr y alcanzarlo sin el si quiera imaginar lo que se le venía encina con mi locura a millón desatada en el manicomio de mi mente. A las 4 cuadras ya estaba perdido conmigo hablándole no sabes con quien te metiste. Se le ocurrió en la huida meterse en el metro de sabana grande y bajó a lo que daba las escaleras. El metro full de gente de inmediato le metió el pie y la rata cayó y yo encima a darle cuanto coñazo no había dado en mi vida y llegó la poli
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