Vulnerable es ser propenso a sufrir daños físicos y emocionales. Debilidad es carecer de fuerza o resistencia ante un daño. Todos somos vulnerables pero no todos somos débiles. Podemos carecer de fuerza pero no de resistencia. Resistir no es igual a acostumbrarse. Resistir es sufrir un padecimiento físico o moral sin dejarse vencer por él y, a menudo, sin quejarse o tratar de evitarlo. Acostumbrarse es encontrar normal o habitual algo adquiriendo un hábito. Podemos resistir si carecemos de fuerza fisica pero nos acostumbramos a ello hasta hacerlo un hábito. La resistencia nos lleva a desarrollar una fuerza inquebrantable que nos hace capaz de superar cualquier circunstancia, la fuerza interna. Toda decisión surgida desde esta fuerza potencia la #felicidad y ese es el verdadero secreto de #Resiliencia. Debemos estar conscientes que somos vulnerables en un mundo frágil pero con una fuerza inquebrantable que nos hace capaz de superar cualquier circunstancia que nos llegue a afectar si así lo decidimos. Y eso, nos hace ser fuertes.
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