Dios me permitió llegar a la edad promedio del hombre en el mundo. Los 37. Los recibí como lo imaginé, aprendí hacerme cargo de lo que me hace feliz y desde ahí opero, desde la facilidad, felicidad y armonía. En búsqueda de la coherencia. Entre lo que soy, lo que el cuerpo me dice, y lo que digo a través del lenguaje. El tema es que -lo que soy-, tenía muchas capas, y justo en la transición a los 37 (pandemia) me “descubrí” mi otro yo. ¿Sabes cuál es tu otro yo? A ti que lees, te pregunto? Eso que eres y no publicas, eso que hablas a lo interno o a escondidas, en secreto. Eso también eres. Créeme no eres la foto que publicas en Instagram 😜 eres una MASA que se mueve y TRANSFIERE un mensaje. 🤭 En fin, los recibí feliz y por resonancia todos los que me acompañaron se lo disfrutaron hasta los niños, los papás relajados…la música, la vista, la brisa y el mar… con los 4 elementos… hasta a Venezuela llegó, hoy celebramos allá 🥺 Por resonancia hoy la gente amaneció con sueño pero con alegría, seguimos riéndonos de anoche y repasando las fotos… Será una buena semana. ¡Gracias! Los cumplí feliz.
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