Cuando nos visitan las crisis, sobre a todo a mitad de nuestra vida, alrededor de los 40 o 50 años, pensemos que este puede ser el momento idóneo para iniciar la búsqueda interior. Al principio no es fácil. Porque nuestras viejas creencias y miedos tratarán de mantenernos en mil excusas para que no hagamos nada. Y, como todo en la vida, hay muchas maneras de enfrentar esa situación. Pero básicamente hay dos posturas: la del miedo o la de la fe. El miedo es la salida más fácil, porque no se trata de crear nada nuevo, sino quedarnos como estamos y agarrarnos a lo antiguo. El miedo tiene que ver con nuestra necesidad de seguridad y de control. La Fé nos lleva al amor y a creer que existe alguien supremo que es REAL consciente de nuestras acciones y pensamientos, nos lleva a elevar nuestra espiritualidad conscientes de nuestros errores pero hechos para desplegar las cualidades de ese Ser Supremo. Y eso te separa del resto. Encontrarle un sentido a la vida, un propósito, una misión, es el fin último y más elevado del ser humano. Requiere coraje, valentía y una dosis muy alta de fé. Sin esos ingredientes, es llevar una vida insípida llena de vacíos y cada año que pase será un año perdido, que termina igual a como empezó una y otra vez. #despertarespiritual #conciencia #proposito #esencia #energia #vida
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