Desde que aprendí a aceptarme como soy, aprendí a aceptar las cosas como vengan. Para algunos ciertas situaciones podrán parecer un problema, algo grande. Para mí son una oportunidad. Porque Dios me prometió cosas grandes, los problemas y caídas son algo temporal. Pero sus promesas son eternas... Porque para los que aman a Dios, todo obra para bien. Y yo lo amo con mi vida.
You've added this content to your favorites.
Post your comment
Load More